Importancia de la Meditación Consciente (Mindfulness)
Título de Profesora de Biología
Tomarse pequeños intervalos de tiempo durante el día, o bien cada vez que uno lo sienta necesario, para reducir el flujo de pensamientos y aquietar la mente, nos permite obtener a cambio numerosos beneficios: 1) reducción de los niveles de estrés; 2) disminución de la fatiga mental; 3) recuperación de los valores y acciones normales de los neurotransmisores; 4) observación, reconocimiento y control de las emociones; y 5) desarrollo de conexiones neuronales cada vez más eficaces y eficientes; entre los más trascendentales de ellos a nivel del propio funcionamiento cerebral, llevando a quienes asumen esta práctica hacia estados cada vez más elevados de conciencia y bienestar.
La capacidad que la meditación consciente tiene de permitir la profundización de la autoconciencia al serenar la mente, conlleva al desarrollo de las habilidades de percepción, más aún, de la percepción del origen de nuestros pensamientos, encontrándose ahí la clave para poder acceder hacia las regiones más profundas de nuestra mente inconsciente, llegando a las emociones arraigadas de manera subyacente, y a la mente subconsciente, conectándonos con los mecanismos que pueden activar reacciones que deseemos transformar para nuestra propia mejora personal, apalancando el crecimiento del que debemos hacernos responsables.
Conexiones internas
La mente es una fuente inagotable de pensamientos que fluyen sin cesar y en su mayoría sin una razón aparente ni un propósito en específico, siendo generados por la multiplicidad de estímulos que recibimos de forma permanente, los cuales desencadenan a nivel consciente, subconsciente e inconsciente, las asociaciones con los factores desencadenantes de esa continua voz interior. Este fenómeno a su vez se vincula con las emociones y las creencias arraigadas en nuestra mente, bien sea como condicionantes de la forma que adoptan los pensamientos, siendo convirtiéndose en positivos o negativos, o como refuerzo propio de los patrones mentales que les dieron origen.
Este permanente ir y venir del palabrerío mental puede llegar al punto de convertirse en una situación agobiante, generando autosabotajes en las cosas que nos propongamos realizar, incrementando a la vez los niveles de frustración y estrés en el desempeño de alguna actividad, de allí que aprender técnicas de meditación consciente que nos sirvan de herramientas prácticas para reestablecer el equilibrio de nuestros pensamientos, se convierte en un valioso recurso para el mantenimiento de la salud mental en general.
Creatividad productiva
Debido al desarrollo progresivo, tanto de la paz interior como de la conciencia emocional, se incrementa el potencial de la creatividad, no solo por encontrarnos más serenos y por ende canalizar mejor nuestros pensamientos hacia lo que deseamos crear, sino por la capacidad de conjugar de manera más amplia los elementos que nos rodean y la información que obtenemos de ellos con la capacidad imaginativa de nuestro cerebro.
Sea de un modo intencional o no, el artista tiene la fuerte tendencia de encontrarse de manera instintiva con la meditación consciente como recurso para conectarse con las áreas más profundas de su Ser, evocando la siempre bien referida inspiración que lo lleva hacia la materialización física de lo que en un principio sólo estaba en su mente, habilidad que por supuesto puede ser desarrollada para aprovechar al máximo este potencial de la mente e incrementar el rendimiento tanto creativo como productivo en un determinado proyecto.
Superación de conflictos
Otro ejemplo para nada desperdiciable sobre lo que la meditación consciente puede hacer por nosotros, a través de lograr establecer el correcto balance de las emociones y la observación objetiva de los hechos, en una determinada situación, es el volvernos más asertivos hacia la toma de las decisiones y el control de nuestras propias reacciones, en función de la solución de las diversas situaciones de conflicto que podamos vivenciar, gracias a la posibilidad de tomarnos el tiempo mental necesario para seleccionar las palabras correctas y construir así respuestas que consideren a su vez la propia emocionalidad y los sentimientos del otro.
Calmar el bombardeo de pensamientos y en especial a aquellos que nos llevan a emitir los tan nefastos juicios de valor, con los cuales solemos sentenciar a las demás personas, nos abre paso hacia la verdadera comprensión de la realidad del otro, una de las más altruistas bondades con las cuales nos premia la meditación consciente y de lo que nos podemos valer para contribuir también en la construcción de sociedades cada vez más sanas.
Referencias
Calle, R. (2002). El arte de meditar. Edaf.
Castrillón, X. Í. (2021). La atención consciente. Recapitular, ensoñar, meditar: la inmanencia de la consciencia universal. Exlibric.
Delgado, J. (2016). Meditación creativa. 10 pasos. 1 templo metodológico mindfulness para aumentar la creatividad. Opción, 32(10), 911-931.
Polo, J., & Díaz, D. (2011). Terapia cognitiva-conductual (TCC) Como tratamiento para la depresión: Una revisión del estado del arte. Duazary, 8(2), 251-257.
Simón, V., Germer, C., & Bayes, R. (2011). Aprender a practicar Mindfulness. Sello.
Weiss, B. (2014). Meditación. B DE BOOKS.
Art. actualizado: Abril 2023; sobre el original de abril, 2023.
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